El plátano fue descubierto en China por Marco Polo aunque, en realidad, es originario de Indochina. No es de extrañar que en todo el continente asiático sea símbolo de fecundidad y prosperidad.
Su salto al resto del mundo fue paulatino. Los mercaderes fueron introduciéndolo en África y Europa y hacia el siglo XV llegó a Canarias; desde este archipiélago el plátano saltó al Caribe.
Se trata de un alimento que seduce por su color, que resulta fácil de pelar, es energético y contiene numerosas vitaminas. Unas virtudes que lo convierten en una de las frutas más consumidas en todo el mundo.
Contiene veinte gramos de azúcares, y, a medida que madura, la gran cantidad de almidón se transforma en hidratos de carbono muy asimilables; entre ellos destacan la glucosa, la dextrina y la sacarosa. Sus proteínas son escasas y apenas acumula unos indicios de grasas. Por el contrario, lleva mucho potasio (400 mg.), magnesio y un poco de hierro.
Posee poco betacaroteno, y vitaminas del grupo B con el ácido fólico, un poco de vitamina C y también E. Aporta 90 calorías, tanto como tres veces un melocotón. Es riquísimo en potasio, esencial para el mantenimiento hídrico del organismo, que regula las funciones nerviosas y de los riñones y ayuda a combatir la presión arterial alta.
Es muy energético, y resulta excelente como "snack ó tentempié" para los deportistas.
La presencia de azúcares complejos y su capacidad para subir el azúcar de la sangre es inferior a otras frutas azucaradas como la piña o la sandía le hacen compatible con la dieta del diabético.
La presencia de las tres vitaminas antioxidantes, A, C y E, aunque en pequeñas cantidades, le sitúan en la categoría de los alimentos sanos. Jo!!! se nota que soy de la rama médica, jajajaja .
INGREDIENTES para 4 personas:
1 plátano por persona (4 plátanos)
2 cucharada de aceite de coco
4 cucharadas de melaza ( yo he usado melaza de arroz que puedes encontrar en Herborísterias)
4 cucharadas de agua
PREPARACIÓN:
En una sartén caliente pondremos el aceite de coco, añadiremos los plátanos cortados por la mitad y dejaremos tostar a fuego fuerte unos 2-3 minutos.
Mezclaremos la melaza con el agua y removeremos bien.
Ahora es el momento de añadir la melaza por encima de los plátanos y dejarlos caramelizar unos minutos más.
Y ya están listos.
He usado aceite de coco, para darle al plato un punto ahumado y además porque no se quema tan rápido como otras grasas ( mantequilla, margarina,) pero si no lo encuentras, puedes usar aceite de oliva o margarina vegetal.
Espero que os guste, salu2
No hay comentarios:
Publicar un comentario